Vecinos santiagueños se desquitan a cascotazos

En la capital de Santiago del Estero un grupo de vecinos resolvió sus problemas a ladrillazos.

Un joven estacionó su camioneta F 100 en la vereda de enfrente a la suya para aprovechar la sombra de un árbol.

La dueña de la casa, al ver el vehículo estacionado en su lado de la calle, arrancó a tirarle con ladrillos hasta romperle los vidrios y abollarle la carrocería.

Pibe, cuando se dio cuenta de lo que hacía la vieja loca, agarró cascotes y apedreó la casa de la susodicha hasta romperle la puerta y las ventanas.

En el incidente no hubo heridos, sólo hubo pérdidas que realmente valían la pena.