domingo, 9 de diciembre de 2007

A estos cacos no les salió la gran McGiver

Un grupo de chorros se metió por la noche en un banco cordobés, pero al no poder abrir la caja fuerte, tuvieron que irse con las manos vacías.

Los ladrones, que a juzgar por las pruebas serían un grupo de tarados, no pudieron robar ni un sope de la sucursal bancaria.

Después de hacer el esfuerzo de ir a afanar en contraturno, romper la puerta, y meterse en el Citibank, se dieron cuenta que no habían llevado las herramientas adecuadas para vaciar los cajeros automáticos, ni para abrir la caja fuerte.

La banda de boludos, tras ver que no podían afanarse nada, escaparon dejando en el lugar un destornillador, dos hebillas invisibles, cuatro marcadores y una trincheta; herramientas que habían llevado para el choreo.