lunes, 24 de diciembre de 2007

La suerte no lo quiere

Un hombre tuvo mucha suerte para la desgracia, primero logró ganar en el casino, pero a la salida lo asaltaron, entonces decidió seguir a los chorros y terminó arrollado por un auto.

El hombre, de 40 años dueño de unas carnicerías, había ido a jugar unos fichines al Casino de Tigre junto con sus amigos.

Luego de ganar tres mil pesos, el grupo de compinches se disponía a volver a sus casas, cuando unos ladrones disfrazados de policías les afanaron la guita y el auto en el que viajaban.

El carnicero y sus amigos no tuvieron mejor idea que perseguir a los ladrones a pié por la Panamericana…

El jugador terminó internado en terapia intensiva ya que mientras corría a los maleantes fue atropellado por un auto que circulaba por la autopista.

Definitivamente éste sí que es un tipo suertudo!