Si no quieren violencia que aprendan a cobrar

Un árbitro fue violentamente atacado a golpes y puntapiés por jugadores juveniles de los equipos de Jorge Newbery e Independiente de Necochea.

En la golpiza al referí, Sergio Benavides, intervinieron no solo los titulares que estaban en la cancha, sino que también se metieron hasta los suplentes para trompearlo.

Los incidentes se originaron a partir de una avivada de un jugador de Independiente que se aprovechó de un gesto caballeresco para meter un gol, lo que culminó en golpes de puños entre ambos equipos.

Benavides expulsó a cinco jugadores y tuvo que suspender el encuentro por falta de garantías. Con los ánimos exacerbados, los golpes siguieron pero todos para el árbitro, incluso lo patearon hasta cuando estaba en el piso, mandándolo de urgencia al hospital.

Muy lejos de una muestra de arrepentimiento los jugadores fueron a ver al hombre del pito al hospital y al grito de “tomala vos, damela a mi…vamo´ a matar a un referí, le patearon la cama hasta voltearlo. Lógicamente, en el piso… lo siguieron pateando.