sábado, 27 de octubre de 2007

De putas sí, pero no en horario de servicio

Un comisario belga de una comuna de Bruselas pidió mediante una circular que sus hombres se abstengan de ir a burdeles y de beber alcohol durante las horas de servicio.

Esta cagada a pedos para los policías fue porque mientras el comisario Renard estuvo ausente por problemas de salud, los uniformados escabiaron y se fueron de putas todas las noches.

“Algunos agentes piensan que las horas de servicio sirven para emborracharse en bares, frecuentar burdeles o casas de masaje y mantener relaciones íntimas durante su patrullaje”, escribió Renard en la circular.

Después de que esto salga a la luz, las mujeres de los canas entendieron porque cuando sus maridos llegaban a sus casas no querían tocarlas ni con un palo.

“Algo sospechaba yo. No podía ser que nunca tuviera ganas de coger. Y yo como una pelotuda yendo a la peluquería a ponerme linda para este hijo de una gran puta” declaró Marita, la esposa de uno de los policías.